viernes, 31 de diciembre de 2021

REVISTA DE MEDIOS DE DICIEMBRE DE 2021



Elizaveta Ignatovich [Art Blart blog]



Luis Escribano señala que " Los partidos han generado un grave problema con el empleo público temporal, y las maquiavélicas soluciones que plantean darán pie a numerosas reclamaciones de opositores, estatutarios, funcionarios y laborales fijos, que podrán acabar en millonarias indemnizaciones que pagaremos todos los españoles, como es habitual en esta partidocracia" y concluye así que "en caso de ganarse las reclamaciones patrimoniales, el coste a pagar por las Administraciones Públicas debería ser repercutido, según la ley, en el patrimonio personal de las autoridades y funcionarios responsables. Sin embargo, este deber legal, que se conozca, no ha sido ejercido por ninguna Administración Pública, porque ya saben que perro no come perro. ¿Se imaginan a un cargo político del PSOE, PP, VOX, IU, Podemos, Ciudadanos, etcétera, exigiendo directamente la responsabilidad patrimonial personal a otros cargos de su propio partido? Con esta partidocracia, les aseguro que no lo verán en ninguna Administración Pública."

Exmiembros del Tribunal Constitucional, tribunal político al servicio de los partidos que lo elige, hablan de reforma del llamado Estado de las Autonomías, pero en el sentido de profundizar en él y, por tanto, en la disgregación del sujeto constituyente, bienquista a este órgano constitucionario. Apelan a una "lealtad federal" que delata el proyecto del régimen partidocrático de blindar, como se dice ahora, el cacicato autonómico cubriéndolo de ropajes federales -imposibles de toda imposibilidad pues los estados federales supone la existencia de estados previos que eligen libremente federarse-. Pero qué puede importar la razón y la ley a unos estómagos agradecidos que piensan que pueden sobrevivir a la ruina de la nación política y de sus compatriotas.

Sobre el postsanchismo se pronuncia Ignacio Ruiz Quintano: "Al españolejo se le vende que “muerto Sánchez, se acabó la rabia”, y luego vendrán los ayes. Pues no son Sánchez,ni Mariano ni Zetapé ni Aznarín ni Gonzalón ni Leopoldo (“marmolillo peatonal”, para Guerra) ni Suárez ni Arias… Es el sistema, es decir, el sindicato de poder de lo que en buena literatura política se conoce por “oligarquías inverecundas” cuyo factor de gobierno es el consenso político (reparto, corrupción) en el Estado de Partidos, ese Imperio del Bien (Muray) en el que el vicio es la virtud, la mentira la verdad, el mal el bien, el valor la cobardía, la estulticia sabiduría… Ni derecha ni izquierda: centro. No te metas en política (conflicto), que de ella se ocupan los que saben.  –La derecha y la izquierda –dice Negro han convergido en el consenso político: la conspiración de los partidos consensuados contra las libertades en lugar del partido único de los regímenes totalitarios. Es el comunismo por arribaEl consenso, dicho por Muray, ha desplazado al comunismo “porque por fin lo ha realizado”. El consenso político es una nomenklatura tecnocrática economicista semejante a la soviética, que consagra, según Negro, las distopías de Huxley y Orwell como los mejores manuales de teoría del Estado o del Gobierno."

Refiriéndose al gobierno actual, Luis Riestra se pregunta: "¿Pero de dónde salen estos individuos? Pues del sistema electoral de esta partitocracia, como hemos explicado aquí tantas veces, una aberración política que cada día que pase degenerará más. La mejor demostración de eso tal vez sea la que da en un video, que debe verse aunque el personaje es bastante "aburrido", un diputado compañero de escaño del mismo Garzón. En él explica la desconexión total entre ciudadanos y unos diputados que simplemente hacen lo que les dice el órgano director del partido, que vayan Ustedes a saber para quién trabajan, pues algunos parecen a sueldo de Marruecos u otros gobiernos aficionados a repartir sobres. Ante esto siempre aparece alguno que dice "disfruten lo votado", como si en una partitocracia votar sirviera de algo (salvo para legitimarla), y si no, pregúntenles a los votantes del PP en Baleares o Galicia."

Sobre la auténtica naturaleza del voto en blanco se expresa Ignacio Ruiz Quintano: "El TC declaró inconstitucionales los confinamientos consensuados por socialistas y populares, por lo que populares y socialistas, en lugar de entregar sus actas e ingresar voluntariamente en un Centro de Rehabilitación Democrática, resolvieron cambiar de TC, y en la votación para “legitimar” el chalaneo la diputada popular Doña Cayetana Álvarez de Toledo Peralta-Ramos, que, al revés que Barras, habla bien y vota mal, votó… “en blanco”. El voto en blanco no es el chaleco blanco de Robespierre ni el desaparecido derecho de resistencia del pueblo (¡hasta aquí lo mucho de tonto y lo poco de soberano que es el pueblo!); significa, simplemente, que aceptas el sistema, pero que, entre un haz de heno y otro haz de heno, no sabes con cuál quedarte, como le pasó al asno de BuridánPero los partidejos se rigen por la ley de hierro de la oligarquía estudiada por Michels en la socialdemocracia alemana (y puesta a prueba –con éxito, con lo cual se silenció– por Bujarin en el comunismo soviético). Esa ley se resume en que los intereses que representan los partidejos son los que convienen a sus jefes, y el jefe del PP ha incoado a su diputada rebelde un expediente disciplinario por desobedecer el mandato imperativo expresamente prohibido por la Constitución, circunstancia que en su día ya tuvo en cuenta Margarita Robles, nuestra jurista más alta, para sacudirse una multa de su partido por votar contra Rajoy cuando el mandato era la abstención, y a este chamarileo llaman nuestros Hamilton “democracia representativa”. En el Estado de Partidos, un Estado dentro del Estado, los partidos son a la vez “órganos del Estado, legisladores y representantes de sí mismos bajo el pretexto de integrar (nunca ‘representar’) a las masas en el Estado”.

Estas declaraciones de la vicepresidenta Díaz de que advirtió al resto del gobierno de la gravedad de la pandemia antes del 8-M y no fue escuchada deben enmarcarse en la campaña electoral permanente que realizan los jefes de partidos del régimen. Estas puñaladas a sus coyunturales socios de gobierno -PSOE y PODEMOS- son de una gran torpeza, pues también la señalan a ella misma, ya que debió haber dimitido o denunciado públicamente el altísimo riesgo de contagio que significaron acciones estandarte de la izquierda indefinida como el 8-M, así como otros actos colectivos que se permitieron esas infaustas fechas (lo que demuestra que a ella tampoco le importaba mucho la salud pública). Pero quizás sea demasiado pedir que se añada inteligencia al torpe tacticismo de la clase política en su lucha por asegurarse parcelas de poder del Estado.

Víctor Lenore pasa revista a varias publicaciones sobre la llamada Movida de los años 80, para preguntarse: "¿Cuál fue la ideología de la Movida? Antes de nada, hay que aclarar que aquellas canciones chispeantes fueron la banda sonora del aterrizaje en España de la sociedad de consumo. Son practicamente iguales que los anuncios de radio y televisión, basta escuchar “Quiero ser un bote de Colón” (Alaska y los Pegamoides), “Enamorado de la moda juvenil” (Radio Futura) y “Busca algo barato” (Mecano). Alguna incluso terminaría sirviendo de sintonía para anuncios de la 'Planta Joven' de El Corte Inglés. La ideología de la época, podemos decir tranquilamente, fue el consumismo hedonista, con su fuerte poder uniformador. Lo explicó Pier Paolo Pasolini con máxima precisión: “La homogeneización ‘cultural’ nos afecta a todos: pueblo y burguesía, obreros y proletarios. El contexto social ha mutado en el sentido de que se ha unificado de manera extrema. La matriz de la que salen todos los italianos es ahora la misma”, lamentaba en un artículo de 1974. Algo parecido hizo la Movida: disolver casi todas las culturas previas en el crisol del pop estandarizado del turboconsumismo socialdemócrata." Todo ello, sin duda, impulsado por el poder político partidocrático, que detentado por el PSOE, animaba a los súbditos, como en el Franquismo, "a no meterse en política", y a vivir, en este caso, la vida a lo loco, frente a las requisitorias morales católicas de su régimen progenitor, y que no dudó tampoco -señala Lenore-, como el Fraquismo, en censurar aquellos elementos disentientes en aquel conglomerado socio-artístico-cultural.

Rubén Gisbert señala que España ocupa unos de los primeros puestos del índice de miseria de la OCDE, que los bancos españoles se apresuran a deshacerse de sus bonos del Estado ante el previsible cierre del grifo del BCE instigado por el nuevo gobierno alemán, y el previsible horizonte de impagos. Indica que el imparable incremento de la deuda, disparado a partir del gobierno Rajoy, redundará en un aumento de impuestos para mantener la industria política de las administraciones multiplicadas y el clientelismo militante -ya que la inversión en obras públicas se reduce un 60%- que tuvo ya su origen en el "café para todos" del infausto Suárez y en la multiplicación de los centros de poder y parasitismo administrativo a través del Estado de las Autonomías, que no ha supuesto para nada una descentralización. El estado de Partidos, que es un fin en sí mismo, ofrece un futuro de miseria para los españoles, que aún se dejan engañar con los fantoches identitarios que les ofrecen las facciones del Estado o partidos, a cambio de su ruina.

Ignacio Ruiz Quintano reflexiona sobre la conmemoración de la Carta Otorgada de 1978: "Fabián Estapé, el fabiano del desarrollismo franquista, decía que la Transición la trajo el 600, pero la C’78 tuvo un origen misterioso (religioso): no salió de la libertad constituyente, sino de un poder constitucionario (el poder constituido que se atribuye poder constituyente), y no constituyó una separación de poderes (única razón de ser de una Constitución), sino una oligarquía de partidos. El pueblo español, que presume de habérsela dado “con mucho trabajo”, se enteró de que se estaba haciendo por una primicia de “Cuadernos para el Diálogo”. La han leído ya el Rey, Suárez y el cardenal Taracón; ha pasado por la Generalitat y está en un armario de “Mundo Obrero”. ¿Por qué se le escamotea al resto de los españoles? [...] Hoy, los mismos partidos que la atropellan para confinar ilegalmente a los españoles, se cargan al TC que se lo afea y montan la Love Parade del Consenso. Están por encima de la Constitución: es la dictadura de los festivócratas."

Rubén Gisbert señala que la nueva ley, que permite declarar "víctima de violencia de género" a la mujer que lo solicite simplemente por haberlo denunciado, incluso si su presunto agresor es absuelto, consolida la mafia del hembrismo partidocrático. Recuerda que de los 400.000 delitos registrados cada año en España de 200 a 300 corresponden a la llamada "violencia de género" (trampa ideológica, por otro lado, que atribuye esos delitos domésticos a un patriarcal sentimiento de superioridad del hombre sobre la mujer), y que tal ley, -en la que los falsos representantes de los electores en el parlamento no tienen nada que decir pues la elabora directa y desvergonzadamente el gobierno- busca justificar el abultado presupuesto del ministerio de Igualdad creando nuevas "clientes" de sus atenciones, dada que las reales no sirven para legitimar los sueldos de toda la red clientelar que crea ministerios partidocráticos de esta ralea, que viven de la exacción de los súbditos de la Monarquía de partidos y de crear divisiones y tensiones identitarias y comunitaristas en una sociedad que empieza ya a hartarse de sostener con sus votos tales abusos.

Gregorio Morán explica la situación creada tras la petición de unos padres de Canet de Mar (Cataluña) de que su hijo reciba un 50% de enseñanza en español: "La epístola del matrimonio de Canet de Mar ha sacado a flote lo más oculto de la retórica nacionalista en Cataluña. El secreto mejor guardado desde los tiempos de Jordi Pujol. La inmersión lingüística, el falso objetivo de lograr una coexistencia entre dos idiomas pertrechados y empujar a uno para que pudiera equilibrarse con el otro. Todas las paparruchas respecto a las bondades del bilingüismo asimétrico se han venido abajo, cuestionando el mito autocomplaciente del supuesto pilar de la convivencia en Cataluña. La inmersión lingüística, consensuada y benevolente, escondía un objetivo que se convirtió en descaro: la inmersión política. La obligatoriedad de una lengua única era la añagaza para lograr la identificación con el catalanismo desde la infancia. [...] La lengua en Cataluña es un instrumento político que, además, constituye una forma de relacionarse entre la ciudadanía [...] ¿Qué sería de Esquerra Republicana si ahora que el independentismo está en caída libre no pudieran apelar a la lengua? Es la última fortaleza que consiente las dosis de mando y xenofobia imprescindibles para construir una ideología patriótica. El valor de la carta del frutero de Canet está en que cuestiona la hegemonía omnímoda de la inmersión política, ese sujeto imprescindible para conformar una mayoría parlamentaria [...] Pedían el 50% y los tribunales les concedieron el 25%, pero lo consideran demasiado quienes viven y medran gracias al 100%. Admitir agujeros amenazaría al sistema clientelar construido durante décadas. [...] Tocan a rebato: todo el que cobre la subvención deberá manifestar su rechazo. Los sindicatos UGT y CCOO se apuntaron los primeros". Este episodio demuestra, como indica Ruiz Quintano, la inexistencia de una Constitución: "Cinco años tiene el niño de Canet, famoso porque en el cuento de hadas de la Transición que los liberalios cantan como ruiseñores en los pimpollares, grita “el rey va desnudo” (idea que en “El conde Lucanor” nuestro Don Juan Manuel representa con un negro –“yo estoy ciego o vos desnudo vais”– en el papel del niño). Y ha sido un niño de cinco años quien dijera al “viejo y sabio pueblo español”, solo en la escuela, que no hay auténtica Constitución, pues si la ley es la defensa de todos contra uno, una Constitución es la defensa de uno contra todos.La única seguridad que puedo darles es que la Constitución será sostenida por mí con todos los recursos legales bajo mi poder –contesta el presidente Eisenhower al gobernador de Arkansas, Orval Faubus, que desafía con la Guardia Nacional la orden de la Corte Suprema de admitir en el distrito escolar de Little Rock a nueve estudiantes negros. Y envía a la 101 División Aerotransportada, cuyos paracaidistas escoltan a los estudiantes en la escuela."

Alberto Iturralde y Emilio Triviño comentan la noticia de que el gobierno favorecerá la creación de la figura de los "comunicadores fiables" en las redes contra los delitos de odio como una manifestación más del afán totalitario del régimen partidocrático del 78, para que todo quede bajo el control de los partidos políticos estatales. La censura "bienintencionada" o "virtuosa" ha pasado a convertirse en una herramienta cada vez más eficaz en la abolición de la libertad de pensamiento, sin la que la libertad de expresión carece de sentido.

La respuesta del pequeño ayuntamiento de Camporredondo a la extemporánea petición del Senado de cambiar el nombre de una calle en aras de la llamada "Memoria histórica" (conceptos que no serían conjugados para Gustavo Bueno, pues según éste mismo la memoria pertenece al terreno de lo subjetivo personal, frente a la historia como disciplina científica) es índice de la rebelión de la sociedad civil, encarnada por munícipes que no reciben un sueldo y que aspiran a ser representante de sus paisanos en un sistema que no es representativo. Su réplica va directa al meollo del problema que representa una clase política, la partidocrática, por ende ignorante de las propias leyes que elabora sin contar con los súbditos a los que irrepresenta, todo ello para consolidar un conglomerado ideológico en el que pretende hacer florecer el criadero de sus votantes.

Alberto Pérez Giménez analiza el discurso navideño del Rey: "Que el discurso de Nochebuena del Rey es supervisado por el Ejecutivo es algo sabido. Pero este año ha sido el primero en el que sus palabras podrían ser suscritas, de inicio a fin, por el inquilino de Moncloa en una de sus jaculatorias televisadas disfrazadas de comparecencia institucional sin preguntas. [...] En definitiva, cinco palabras para el tarifazo, cuatro líneas para la crisis económica, ni una sola sobre su padre. A cambio, confianza total en la recuperación económica pese a lo que digan las previsiones, orgullo por la recuperación del empleo y presumir de la vacunación para afrontar una pandemia que ha dejado en casa, solos, a muchos españoles viendo el discurso más sanchista de Felipe VI". Todo esto está, empero, en consonancia con el papel que le corresponde al rey en la actual Monarquía de partidos españoles, el de dar un barniz de prestigio institucional al reparto del poder del estado, al saqueo de los súbditos, y a las divisiones ideológicas interesadas introducidas en el sujeto constituyente nacional. Indigno papel, pues, de una institución, que, aparte de consagrar el principio de desigualdad, supone una deshonra para los españoles amantes de la libertad política.

miércoles, 1 de diciembre de 2021

REVISTA DE MEDIOS DE NOVIEMBRE DE 2021


 

German Lorca [Art Blart blog]


Alberto Iturralde y Emilio Triviño ven en su ya vaticinada marcha atrás en el "decretazo" contra las eléctricas, y en otros como el de las cláusulas suelo, la evidencia de que todos los presuntos mecanismos de control no sirven al súbdito de la Monarquía de Partidos sino al disimulo de la comunión de intereses entre oligarquía política y económica.

El politólogo Santiago Armesilla trata "de lo que Gustavo Bueno llama "Derecha Socialista", la tercera modulación de las derechas alineadas con el Antiguo Régimen (unión del Trono y del Altar), tras la Derecha Reaccionaria y la Derecha Liberal. Armesilla conecta "esta derecha alineada con lo que Marx y Engels exponen en el "Manifiesto Comunista" respecto de los socialismos reaccionarios (particularmente el socialismo feudal / clerical y el socialismo pequeñoburgués) y también con el socialismo conservador o burgués. Todos estos socialismos combinados, que criticaron Marx y Engels, darían lugar a los modelos de derecha socialista desde el Segundo Reich de Bismarck, pasando por el Estado de bienestar de William Beveridge en el Reino Unido y, ya pasando a España, los ejemplos del siglo XX más característicos: Antonio Maura, Miguel Primo de Rivera y Francisco Franco." Así, el vídeo "expone críticamente, desde el materialismo político, lo que fue la derecha socialista: una Contrarrevolución desde Arriba contra la Revolución desde Abajo de las izquierdas definidas anarquista, socialdemócrata y comunista. Y que, por ello mismo, es hoy un fósil histórico repudiado por la mayoría."

La audiencia de Sevilla condena a dos años y tres meses de cárcel al expresidente de Invercaria por un delito de malversación. Comentando esta noticia, Luis Escribano señala que: "Que nuestro sistema judicial sea pésimo se lo debemos, en origen, al sistema partidocrático, que permite que el Legislativo (partidos que aprueban el Código Penal y su ley procesal -Ley de Enjuiciamiento Criminal-) dicte leyes para que la clase política quede impune, tengan penas mínimas (en algunos casos), sean indultados, o consigan toda clase de rebajas en las cárceles (cuando alguna rara vez ingresan). [...] Entre la atenuante por dilaciones indebidas del Juez instructor (bajando las penas), los argumentos de la Audiencia Provincial para librar a Cantos y González (sobrino de Felipe González), y entre esos argumentos que la empresa pública INVERCARIA no considerara mermados sus fondos y que no los haya acusado (¿de qué partido eran los cargos que debían acusar?), unos fondos que eran públicos (¡manda narices los jueces de la Audiencia!), de nuevo se libran o imponen condenas mínimas por esta corrupción política. Si la mayoria de la nación sigue apoyando esta mierda con sus votos a los partidos, seguiremos obteniendo daños y perjuicios a nuestro patrimonio público. Pida a sus vecinos, amigos y familiares que votan a partidos que le explique por qué esos partidos permiten que ocurra...al menos, si no van a dejar de votar, que pasen vergüenza."

Alberto Iturralde y Emilio Triviño analizan el caso de Agapito García, ilustrado en el documental "Hechos probados: terror de Estado", que ejemplifica cómo Hacienda, al servicio de la "ratio status" de conseguir dinero sin límites para un Estado elefantiásico y corrupto, se sirve de un derecho tributario ante el que el súbdito contribuyente se ve indefenso como un delatado a la Inquisición (no necesariamente española, pues hubo otras mucho más mortíferas), obligado a demostrar su inocencia. Para ello, esta Inquisición moderna, a las órdenes de la Monarquía de partidos, que trata a la gente como objetos dilectos de exacción, se sirve del principio inaudito de "solve et repete", es decir, paga para poder reclamar, lo que es, en sí, un atentado a la presunción de inocencia. Si el sufrido penitente tiene dinero para pagar la deuda imputada, la multa y los intereses que taimadamente se dejan correr, podrá recurrir a los tribunales y obtener, con más frecuencia de lo que se cree, la restitución de lo aprehendido (desquitando honorarios de abogados); pero si no tiene solvencia económica, se verá embargado sin piedad, y arruinado quizás de por vida.

Rubén Gisbert señala que el hecho de que los jefes de PSOE y PODEMOS obliguen a sus diputados díscolos a votar por el candidato del PP a la presidencia del Tribunal Constitucional como informa El Confidencial demuestra la farsa organizada en torno al consenso, que sólo lleva a la corrupción. No hay representación política alguna, ni separación de poderes, de modo que el súbdito del régimen, que no ciudadano, no puede hacer nada por controlarlo.

Daniel Ortega se atribuye la victoria en Nicaragua con más del 80% de abstención. La abultada tasa de abstención tiene el efecto de deslegitimar a un gobierno o candidato presidencial, que, aunque acceda al poder según la legalidad del sistema (hasta las dictaduras constituyen estados de derecho, pues en ellos rigen leyes), carece de legitimidad, y su consecuente debilidad lo hará más inestable y propenso a la caída.

Sobre la partidocrática renovación del Tribunal Constitucional se expresa Gregorio Morán en los términos siguientes: "Se ofende a quienes aún creen que los Reyes Magos vienen de Oriente, cuando la verdad es al revés como demostró nuestro emérito yendo a vivir en Abu Dabi y llevándose de paso los regalos. La engañifa del Tribunal Constitucional es una patochada de mafiosillos que han deteriorado la imagen del supuesto guardián de la Constitución hasta límites que rondan el terrorismo de Estado. Por principio se trata de renovar el Tribunal y lo que hacen es pasarlo por la escombrera. No me creo una palabra de que haya dos mirlos blancos y dos grajos negros; cuando alguien participa en una componenda así no hay buenos y malos sino adictos y perversos. Tengo hacia los jueces en general una cierta prevención que viene de la experiencia. [...] Pero me cabe una pregunta ciudadana: ¿el juez Arnaldo no tiene el puntillo de retirarse para dignidad de su gremio y de la Constitución? Doy por ausente la suya. De todos modos el asunto deja muchos flecos, entre otros selecciono la humorada del portavoz de Podemos, el abogado Jaume Asens, que bendijo el trágala “tapándose la nariz”, lo que le ha valido inmerecidas consideraciones. Con toda probabilidad este trepador incandescente no sabrá que esa idea de la pinza en la nariz fue el recurso que inventó el periodista italiano Indro Montanelli, un conservador ilustrado, para orientar el voto hacia la corrupta Democracia Cristiana. Uno se pregunta desde cuándo estos aspirantes a los cielos del poder empezaron a taparse la nariz para no olerse a sí mismos."

Ignacio Ruiz Quintano reflexiona sobre la anulación por parte del TC del impuesto de la plusvalía municipal, y sobre la declaración de inconstitucionalidad de los sucesivos estados de alarma: "Una ministra del Reino promete, subida a un púlpito, y entre ovaciones enfermas de sus partidarios, “arreglar el lunes”, tal que la Camacha de Cervantes en “El coloquio de los perros” (hacer nacer berros en una artesa era lo menos que ella hacía), el cobro de un impuesto declarado ilegal por el TC. En cola, un Tony Manero de la Españeta-teta que hace de presidente declara al mundo de las elites que él, desde luego, volvería a confinarnos contra la Constitución, según dictamen del TC, que con estos respetos viene a ser un busto de Kelsen para que caguen las palomas. Con groserías así, España ofrece oficialmente al mundo la magia política de un hamponato. “Quis custodes?” ¿Quién protege? Nadie. La relación protección-obediencia era el núcleo del dibujo hobbesiano del Estado: tú me proteges y yo te obedezco. Esto lo saben los malos, que intentan conquistar el Estado para hacerse con tu obediencia (además de tu bolsillo) y ahorrarse su protección: el negocio redondo. [...] Del Estado autoritario franquista, con el partido como órgano del Estado, al Estado total progresista, con el Estado como aparato instrumental de los partidos, que son un solo partido, dueño del poder soberano. Nada contra el partido, nada fuera del partido, todo para el partido, todo a través del partido. Al afeitarte, los barberos del sistema te meten en la boca la manzana del “Estado de derecho”, que significa que hasta la violación del derecho puede hacerse de manera legal por los Tom Hagen de la película. Y todo pasa por el miedo, factor del gobierno despótico para Montesquieu y sostén del gobierno revolucionario para Robespierre."

Comentando la información del Saf sobre la situación de la negociación del Anteproyecto de Ley de la Función Pública de Andalucía, Luis Escribano señala que: ""El gobierno del PP y C's pretende colonizar políticamente la Función Pública andaluza, y ha previsto en el Anteproyecto de Ley crear más altos cargos por debajo del rango de Dirección General, para ser ocupados por más políticos nombrados a dedo. Además, en el Anteproyecto evitan regular las infracciones, sanciones y el procedimiento para exigir responsabilidades a los altos cargos directivos. No tienen vergüenza alguna. Estos han venido a heredar y empeorar el caos creado por el PSOE, y el que no quiera verlo, padecerá las consecuencias como el resto de andaluces, salvo que sea un ingenuo u otro corrupto."

A vueltas con el TC y el enésimo reparto de sus magistrados, se pronuncia Ignacio Ruiz Quintano: "la vida llevaría a García Pelayo a presidir el TC de la Constitución del 78, y a traicionarla por Rumasa, y a volver a Venezuela para morir, según la leyenda, de melancolía. Aquella gatada del TC fue el primer clavo en el ataúd del 78; el último lo acaba de remachar Casado al vender su parcela heredada en ese poder constituido que se atribuye poder constituyente, lo que lo convierte en un poder constitucionario. Es el entierro goyesco de la sardina’78. Con su decisión, Casado aplaza la ley de pandemias que nos vendía, versión posmoderna de la ley habilitante de Hitler en Weimar. El TC no es poder judicial –justifica Casado, y no lo hace por el “presque nulle” [sic] de Montesquieu“Poder judicial” sólo es un epígrafe en la Constitución’78 (el término no aparece más), porque, idealmente, no es un poder, sino una autoridad que Casado deslegitima para siempre con su enjuague timótico (de timo, no de ira). Para él la política es un listo (él), un tonto (Ayuso) y un primo (el votante). La estampita de Julián Delgado. La “atonía popular” hace el resto". Todo esto lleva al mismo Quintano a reflexionar sobre los traidores de la Transición y Antonio García-Trevijano: "Quien mejor retrató a estos traidorazos fue el coordinador de la Junta Democrática, que los padeció, y que vio en el espectáculo español a la muerte de Franco el espectáculo francés a la caída de Robespierre: el primer impulso del ejecutivo es continuar el robespierrismo (Arias) sin Robespierre; atropellados por la alegría popular, tras un intento de apertura de Barère (Fraga), proponen un pacto de reconciliación nacional entre represores y reprimidos (reparto de botín, ley electoral apañada), y Boissy d’Anglas (Suárez) presenta una Constitución por consenso (del poder y las finanzas); este Estado, sin división de poderes, es gobernado por Barras (Gonzalón) como botín de una clase gobernante (sindicato de profesionales del poder)… a perpetuidad. Qué desfachatez."

Alberto Iturralde y Emilio Triviño entrevistan a José Antonio Villalba, profesor de matemáticas en Secundaria para hablar sobre la situación de la Enseñanza en España. El profesor pasa revista a los males del sistema educativo actual que parten fundamentalmente de la LOGSE (aunque en épocas anteriores se apuntaban indicios de deterioro), como la bajada de nivel en la exigencia de contenidos, que son sustituidos paulatinamente por la evaluación de las llamadas "competencias", que son procedimientos o técnicas, -y podríamos añadir- la terapeutización de los alumnos mediante diagnósticos y censos, instrumentos de control férreo de los psicopedagogos a través de los departamentos de Orientación y planes de acción tutorial, que contribuyen grandemente a otro de los males de la enseñanza actual, la ideologización interesada manu militari de la actividad docente, que convierte en dogmas de fe vías decreto ideologías como la de género y la "queer". No se pretende, pues, formar a ciudadanos que sepan desenvolverse social y profesionalmente, sino a un precariado laboral sumiso a consignas político-ideológicas (lo único que su escasa formación en la tecnología intelectual que supone su propia lengua les permita asimilar y repetir) que puedan identificar en la correspondiente papeleta de voto que se les indique.


domingo, 31 de octubre de 2021

REVISTA DE MEDIOS (Octubre de 2021)


 

Friedrich Seidenstücker [Fantomatik blog]


Ignacio Ruiz Quintano se pronuncia sobre la ilegalidad de los sucesivos estados de alarma en el punto álgido de la pandemia: "Los partidos se saltan la ley (la defensa de todos contra uno) y la Constitución (la defensa de uno contra todos) por humanitarismo (“salvar vidas”, lo llaman: BolinagaGalhi, Covid…) [...] El Congreso puede encarcelar ilegalmente (y sin consecuencias) a la ciudadanía porque lo que llamamos Constitución es una Carta Otorgada. La Constitución se impone de abajo arriba desde la libertad constituyente, y la Carta Otorgada se impone de arriba abajo desde el poder constituido, que otorga unas libertades individuales (no la libertad política), y por lo mismo que te las da, te las quita, como ha sido el caso. " Constitución, en realidad, sólo hay una, la americana, escrita porque los fundadores venían escaldados de la “no escrita” de los ingleses: no querían un rey absoluto, pero tampoco un Parlamento absoluto, y con la pista que les dio Montesquieu (a un poder sólo otro poder lo detiene), dividieron la “soberanía” y separaron los poderes… para que los ciudadanos, en palabras de Madison, pudieran dormir tranquilos. Lo llamaron “democracia representativa”, de la cual en Europa estamos ayunos de lo que es y ahítos de lo que lo parece."

Carmona 'retrata' las puertas giratorias del PSOE: "Nadie se indignó por el asalto a INDRA"Como señala el subtitular de la noticia, "El PSOE ataca a Carmona por su incorporación a Iberdrola. Pero fuentes del partido recuerdan que nadie dijo nada cuando se colocó a un dirigente del PSC en Indra o a Pepe Blanco y José Montilla en Enagás". El enfado en el partido más importante del régimen partidocrático parece debido más a la falta de oportunidad del momento, cuando se disparan los precios de la electricidad y el gobierno de turno aparenta cargar contra las compañías del sector, que a un verdadero rechazo de la inercia de las "puertas giratorias" que grandes corporaciones del IBEX ejecutan incorporando a sus nóminas a antiguos políticos de los partidos que han servido a sus intereses.

Sobre la reciente sentencia del Tribunal Constitucional, que declara inconstitucionales ciertos aspectos del decreto del gobierno Rajoy sobre las cláusulas suelo, consensuado con PSOE Y Cs, el jurista José Luis Escobar señala que tal normativa buscaba beneficiar a los bancos, ahorrándoles gastos, en vez de hacerlo con los súbditos afectados por el fraude de ley de dichas cláusulas. En todo esto subyace, según Escobar, la falta de separación de poderes, que sostiene la alianza del poder partidocrático, -que elige a los miembros del CGPJ quienes eligen a su vez a los jueces del TS-, con la oligarquía económico-financiera, que es para quien en realidad legisla.

Comentando unas recientes declaraciones de Felipe González sobre el populismo, Ignacio Ruiz Quintano señala: "Aclarémoslo para el españolejo joven: no hay más populismo que la democracia, definida por Lincoln en Gettysburg: “Gobierno del pueblo, por el pueblo, para el pueblo”. [...] Como en Europa no se puede hablar de demagogia, pues implicaría dar por sentada la democracia, la propaganda de los Estados de Partidos llama populismo a la demagogia, y al consenso (método de gobierno de los oligarcas), democracia. La proverbial (y cultivada) ignorancia del españolejo en teoría política hace el resto, con las ideologías liberales inculcando a las masas la idea de que los asuntos públicos no son sus asuntos, salvo el acto de votar, y de “votar bien”, dicho por el Saint-Just de Puerta de Hierro (para Saint-Just la voluntad general no era la de la mayoría, sino la de los puros contra los que “amenazan la libertad”). La propaganda nacional viene llamando populismo a lo de Podemos y lo de Vox, aunque ninguno de estos dos movimientos ha hecho suyas, nunca, las dos vindicaciones del populismo o democracia: elección directa y separada del gobernante y un sistema electoral mayoritario, contra el proporcional de Gonzalón."

El economista Juan Ramón Rallo resalta que el "bono cultural" de 400 € que la actual facción estatal en el gobierno promete a los jóvenes al llegar a la mayoría de edad para votar es un modo de comprar su voto. Afirma Rallo que se podría esperar que el partido no llegara al extremo de explicitar sus verdaderas intenciones, pero recuerda que ya anteriormente en votaciones en Aragón el mismo partido prometía una partida que fue publicitada explícitamente como recompensa a votarle. Los partidos del régimen no tienen empacho, pues, en utilizar el dinero del contribuyente en beneficio de su propia ambición de poder, ya que su función representativa de la sociedad civil es inexistente.

La Junta [de Andalucía] mantiene las grandes subvenciones de carácter nominativo a CCOO y UGT, que no han devuelto todavía el dinero defraudado en el pasado. Paco Núñez concluye su artículo citando al activista social Roberto Torres: "«Personalmente, considero que los sindicatos deben renunciar a la financiación pública. No se puede servir al gobierno y defender con lealtad, integridad y determinación a los trabajadores. Tienen que despegarse de la teta pública y aprender a vivir de las cuotas de los afiliados para recuperar la legitimidad y la confianza de los trabajadores. Es fundamental que la ética sindical sea el mecanismo impulsor de la renovación de los sindicatos mayoritarios. El sindicalismo independiente es el único camino para defender a capa y espada los derechos sociales» Tal ética sindical es imposible cuando los sindicatos citados, UGT y CCOO, encarnación bicéfala del antiguo sindicato vertical, son órganos del Estado al mismo nivel que los partidos, que son subvencionados por el súbdito-votante, y sólo atienden a los intereses de la casta partidocrática.

El politólogo Santiago Armesilla señala que la pérdida de músculo de la economía española estos últimos 50 años está ligada al sometimiento de la oligarquía política y económica al papel asignado a España por Alemania a través de la UE dentro de la llamada división internacional del trabajo, que ha llevado a la desindustrialización de nuestro país en favor de la aspirador alemana, que tiene a cambio donde mandar sus turistas y vender sus productos de alta tecnología. Con tal política, la oligocracia partidocrática demuestra su falta de carácter representativo de los intereses de la nación.

Indican Alberto Iturralde y Emilio Triviño que, recurrentemente, aparece la pregunta de si es necesaria una reforma constitucional, y dan su criterio acerca de las propuestas que surgen, cada vez con más frecuencia, para intentar corregir los fallos de nuestro sistema político. Tales proposiciones de reforma se dan cuando el régimen partidocrático entra en crisis, y sólo buscan reajustes parciales para que todo siga igual, al estilo leopardiano. Tales reformistas son, pues, los más conservadores, pues no conciben que, por cuestión de principio, no hay Constitución sin separación de poderes.

Resalta Rubén Gisbert la hipocresía de los partidos que tenían, al parecer, un acuerdo desde febrero para renovar órganos como el Tribunal Constitucional, un tribunal político nombrado por los partidos del régimen al servicio de sus intereses. Han agitado, entre tanto, a su público de forofos respectivos señalando la maldad del contrario, cuando lo único que han hecho es medir los tiempos de su conveniencia como cabezas de la misma Hidra que son.

Vargas Llosa y su fundación se muestran descarnadamente en el reportaje de Víctor Lenore, y a pesar de sus ansias de libertad indefinida, como un ente que afirma sin prejuicios buscar recaudación, y que se presenta rodeado de políticos del segundo partido del régimen, o marca blanca del PSOE, como dijo alguien, con lo que su denuncia de la cultura como una "dependencia estatal" queda más que en entredicho. La "cultura" como industria, y, en este caso, como abrevadero de patos más o menos mareados, resulta aquí en evidencia en cuanto que inseparable e inconcebible fuera de la tutela del poder partidocrático.

Rubén Gisbert recuerda que el gobierno de España ha aprobado que en lo sucesivo todas las vías públicas de autovía serán de pago. Así el gobierno de Sánchez recaudará aproximadamente 2.000€ mas por ciudadano al cabo del año. La medida pretende justificarse por el coste del mantenimiento de las vías publicas que suponen un gasto de 1.371 Millones anuales, cuando ya existen seis impuestos que gravan la circulación. Frente al afán confiscatorio de los partidos o facciones del Estado para mantener las onerosísimas duplicidades administrativas y la industria política, el súbdito de la Monarquía de partidos no tiene ninguna defensa ni poder de iniciativa, y ni siquiera la busca, pues, como decía Antonio García-Trevijano, "la ocultación de la verdad fomenta una pasión depravada por la tranquilidad que hace de los gobernados los primeros enemigos de sus propios derechos" (cf. Idem, Teoría pura de la Democracia, 2016, p. 19).


viernes, 1 de octubre de 2021

REVISTA DE MEDIOS: Septiembre de 2021

 


Alan Feltus [Weimar art blog]


Sobre el tan traído y llevado tema de la recuperación económica en la pandemia, Luis Riestra señala que:""Como decía ZP1 y ahora su sucesor: "La economía tiene que estar al servicio de la política", de ahí que no se le conozca, por ejemplo, ni una sola política sectorial de futuro que facilite al sector privado sacarnos de esta crisis, sino meras ocurrencias o plagios. ¿Y a quién sirve la política? Pues a una oligarquía de partidos estatales y a un establishment cómplice de sus desmanes, no a los ciudadanos, tema que hemos tratado aquí extensamente. Este "orden" perverso debió caer en la anterior crisis, pero lo salvó la UE, como ahora, y hasta que no cambie dicho orden habrá que padecer el expolio de su enorme ejército de parásitos, endeudamiento público, disfuncionalidades, ocurrencias ruinosas y delirios constantes. Ese es el gran enemigo de la recuperación española."

Tratando del manido concepto de populismo difundido por los medios oficiales, Ignacio Ruiz Quintano indica que "Su idea es meternos en la chola que la democracia no es el juego mayoría-minoría (¡populismo!), sino el consenso político (eufemismo de reparto, es decir, de corrupción), fórmula de gobierno de la oligarquía de partidos para garantizarse el tuya-mía (tiquitaca y pase atrás) de la estabilidad. La inestabilidad del momento es consecuencia del solapamiento de consensos: el del 78, moribundo e invocado por los autodenominados “constitucionalistas”, y el separatista, engordado como un tudesco, rampante y seguramente final, aunque la gente de orden, que vive en el Estado de Inocencia, antes de la Caída, cree que no hay derecha “mala”, y que, en consecuencia, ninguna derecha lo apoyará."

Es el mismo concepto de falsa democracia que Estados Unidos intentó "exportar" a Afganistán, cuyo precipitado abandono incendió los medios a finales de agosto, y sobre el que se pronuncia el mismo Quintano: "Al crimen de las Torres Gemelas respondió Bush llevando la democracia a Afganistán y a Mesopotamia, con Blair tirando octavillas de la Tercera Vía de Anthony Giddens, y Aznar, copias de la Transición de Victoria PregoLo de llevar la democracia como quien lleva a San Roque por el mundo fue cosa de Wilson, que no halló mejor pretexto para justificar ante su opinión pública el envío de tropas a la guerra del 14. En eso los gringos eran como el perro de Paulov: oían “defender la democracia” y corrían a alistarse. Pero la democracia que exportan los gringos no es la suya (después de todo, la única que ha habido), sino el viejo tiquitaca canovista de dos partidejos jugando al tuya-mía, y para el papel de Romero Robledo (el señor que amañaba los resultados) escogieron el famoso sistema proporcional que impusieron al continente europeo después de Normandía para controlar la Guerra Fría. En el periodismo español ya he oído que el problema de Afganistán es que falta… consenso."

La multitelevisada reaparición de los talibanes en Kabul ha revelado, según Guadalupe Sánchez, las contradicciones del feminismo institucional: "El velo islámico es, ha sido y será un símbolo de que no somos más que una pertenencia. Por eso atenta frontalmente contra los derechos humanos y las libertades fundamentales del individuo que conforman los cimientos de las civilizaciones occidentales contemporáneas. Que desde las instituciones nacionales y europeas se esté promoviendo su uso en nombre del feminismo, la inclusividad y la diversidad constituye una aberración no sólo jurídica, sino también ética y moral. El retorno de los talibanes al poder en Afganistán ha traído a la palestra, en el mejor de los casos, un silencio atronador por parte del feminismo institucional. En el peor, ha evidenciado el cretino intento de equiparar la situación de las mujeres de allí con las de aquí, soslayando que lo que en occidente responde a tradiciones o costumbres que algunas siguen voluntariamente, en medio oriente es una imposición. En España, la Biblia no es fuente de derechos y obligaciones, mientras que en Afganistán y otros países donde rige la ley islámica, el Corán sí que lo es."

La Consejería de Salud aduce motivos que justifican la eliminación de todas las agencias empresariales y otros entes de la Junta de Andalucía. Tras analizar estos motivos y referir las entidades afectadas, Luis Escribano señala que "La reducción del gasto público (personal, sedes y contratos para su funcionamiento, etcétera), la disminución de la corrupción, la racionalidad organizativa y la eficiencia que se conseguiría con la extinción de los entes instrumentales y el despido del personal laboral innecesario, entre otros aspectos, serían muy considerables a corto-medio plazo para la Junta de Andalucía, es decir, para la inmensa mayoría de los andaluces. Sin embargo, el gobierno andaluz no para de repetir el mantra de la imposibilidad de extinguir determinados entes instrumentales (sólo hablan de fusiones, que nada solucionan) o de despedir al personal de esas agencias empresariales -y fundaciones, sociedades mercantiles, etcétera-. [...] Es evidente que el objetivo político de los partidos políticos es otro muy distinto al del interés general. Seguirán con el engaño a los ciudadanos con el único fin de no perder votos o conseguir más, con el fin de perpetuarse en el poder y mantener los privilegios. Concluyo, y aprovecho para reiterar la misma advertencia que siempre hago y seguiré haciendo: a todos los partidos políticos sólo les interesa un sistema en el que puedan abusar del poder sin consecuencias negativas para ellos (partidocracia), porque detrás hay un modo de vida muy privilegiado."

El gobierno promete 144 leyes y decretos antes de fin de año "para que la recuperación sea justa". La hiperinflacción legislativa es una de las características del totalitarismo democrático de los Estados de partidos, que sustituye legislación por derecho en su afán de control total sobre la vida de los súbditos. Como señala Dalmacio Negro: "En la práctica, la burocracia, velando por el bienestar de los administrados produce la frondosa y cambiante legislación ejecutiva: se institucionaliza la revolución legal permanente congruente con la movilización total, que genera una incertidumbre y una inseguridad crecientes. Hasta técnicamente las leyes son cada vez peores. [...]. Y, por supuesto, tienden a disminuir o desaparecer las formalidades administrativas que dan cierta seguridad al administrado, por no hablar del control judicial, sometido a toda clase de presiones e influencias, y que, por otra parte, tampoco es inmune al modo de pensamiento ideológico y al ambiente." (cf. Dalmacio Negro Pavón, Historia de las formas del Estado: una introducción. (Posición en Kindle3304-3308). Edición de Kindle.

La falta de protesta "ciudadana" ("30.000 vacunas perdidas —sin protestas; comité de expertos fake —sin protestas; satélite de 200M€ perdido —sin protestas; 230.000 negocios quebrados —sin protestas; Sepe inoperativo 20días —sin protestas; crisis migratoria —sin protestas; desempleo juvenil del 40% —sin protestas…") Ignacio Ruiz Quintano la considera un rasgo del Sistema: "En el Estado de Partidos no estamos representados (su propio creador presume de eliminar con él “todo vestigio de representación”), pues su función es la “integración de las masas en el Estado”, pastoreo del que se encargan los partidos para cerrar el paso a la democracia. Periódicamente, a derecha y a izquierda hay individuos que se descuelgan del sistema y, al pensar por libre, dejan de votar. Como la abstención es el único enemigo del Sistema, surgen Podemos a la izquierda y Vox a la derecha para devolver esos votos perdidos a la tolva estatal: basta con gritar demencialmente que viene el comunismo o que viene el fascismo para que los descarriados regresen a la hoguera campamental del Centro (¡la ilustración analfabeta del centro!), que es el Estado."

Bolaños acaba de un plumazo con la división de poderes: "Los jueces no pueden elegir a los jueces"Este digital de parte, que obvia que el PP no ha fomentado y realizado la independencia del poder judicial bajo sus gobiernos, indica que este ministro del PSOE, "acaba de un plumazo con la división de poderes -en realidad su separación-" (no se puede acabar con algo que no existe) al afirmar que "ni los jueces pueden elegir a los jueces, ni los políticos pueden elegir a los políticos" (falso, por otro parte, pues son los políticos en el parlamento los que eligen al presidente del gobierno, el órgano rector del poder ejecutivo). Tales declaraciones (donde no se sabe dónde empieza la ignorancia y dónde acaba el cinismo) se basan en el sofisma de que ""A todos nos eligen los ciudadanos porque son poderes del Estado. Todos derivan del voto libre de los 47 millones de ciudadanos" (confunde en su subconsciente totalitario a los habitantes del país con los votantes -sustentadores manipulados de su poder-, que, evidentemente, no pueden serlo todos potencialmente) y tienen "el objetivo de que el Poder Judicial tenga base democrática", insistiendo en que es el Parlamento, es decir, los "representantes legítimos de los ciudadanos", los que "tienen que elegir a los tres poderes". Nada cuentan, para este ignaro partidócrata la independencia de los poderes y el control mutuo que deberían ejercer entre ellos (difícilmente serán independientes unos jueces que son elegidos por políticos que son elegidos por los jefes de los partidos a los que los votantes se limitan a ratificar votando listas), como garantía de la democracia y de la seguridad de los ciudadanos, que tampoco cuentan, por ende, con "representantes legítimos", pues lo único que hacen es votar a partidos que les presentan listas sobre las que no tienen ninguna posibilidad de control, sin poder elegir tampoco en elecciones separadas al poder legislativo y al ejecutivo. Este apelación a la "base democrática" no es más que una llamada al orden de la "democracia" franquista, en la no había separación de poderes en origen, sino de funciones, como en el Estado de Partidos actual que es heredero.

Rubén Gisbert indica que el segundo Estado de Alarma será declarado ilegal por el Tribunal Constitucional según ha anunciado su magistrado ponente Narváez. El gobierno de Sánchez, por segunda vez actuó arbitrariamente asaltando la ley y vulnerando derechos fundamentales eludiendo controles y cauces previstos en la constitución y la ley que regula los estados de excepcionalidad. El hecho de que no vayan a seguirse responsabilidades políticas en forma de dimisiones, concluye Gisbert, tal como ocurrió con la sentencia sobre el primer Estado de Alarma, es indicativo del perverso régimen político que sufrimos, en el que los partidos, instalados en el Estados, no representan a los ciudadanos sino a sus propios intereses de clase, por lo que no sienten ninguna responsabilidad ante terceros por sus actos, que serán siempre de parte.

Ángel González Sánchez responde a algunas objeciones expresadas por Pedro Insua a la teoría de la democracia de Antonio García-Trevijano, buscando aclarar en especial el concepto de representación política. Ante la vaga variedad taxonómica que maneja aquél, el autor señala que "la enorme carga valorativa de la palabra democracia en el lenguaje natural ha de ser purgada cuando aludimos a ella de manera técnica." Recuerda que el concepto de esta forma de gobierno en García-Trevijano procede, en parte, de Alexander Hamilton, quien para evitar los excesos y desvaríos de la democracia directa de la Antigüedad "proponía como solución una “democracia representativa” en que una clase política de “personas escogidas”, temperaría las pasiones populares, al funcionar –esto ya en terminología de Trevijano, que la toma de Leibniz– a modo de principio de intermediación entre la sociedad civil y el Estado." A tal idea de la democracia vienen necesariamente asociadas la de la separación de poderes en origen y el control del representante por parte de los representados. Yerra, en fin, el sr. Ínsua cuando afirma que el pacto de PSOE y Podemos es una prueba de la existencia de una democracia en España según Ángel González por dos razones: "Primero, porque no es función del poder ejecutivo la de ser representativo (más que ceremonialmente, del Estado), dado que la relación de mando entre este poder y el ciudadano, como Trevijano distingue, se da de arriba hacia abajo (el mandante es dicho poder estatal), mientras que en el legislativo de una democracia la relación de mando parte, en sentido inverso, del representado hacia el representante (el mandante es el ciudadano en su función de control al diputado del poder de la nación). Y segundo, este argumento de Insua prueba precisamente la tesis contraria, la de que en nuestro país no existe tampoco la separación de poderes, ni por consiguiente la democracia. Sólo puede llegar a haber pacto para formar un gobierno allí donde no existen elecciones separadas a la Presidencia del Ejecutivo, donde este poder se encuentra por tanto unido al legislativo ya en origen. Los españoles, efectivamente, seleccionan diputados elegidos por sus jefes y no pueden ejercer ningún control sobre ellos. Si no existe ningún freno formal al poder, que proteja del mismo a la libertad política, ¿qué democracia puede entonces haber? No alguna, ni poca, ni defectuosa, sino ninguna."

Señala Rubén Gisbert, que en medio de esta terrible crisis económica, el gobierno destina partidas milmillonarias a la reforma de los edificios de los sindicatos, ajada herencia del "patrimonio acumulado" proveniente del sindicalismo vertical franquista. Recuerda que antes de la proliferación de los totalitarismos novecentistas, los sindicatos eran asociaciones civiles sustentadas por sus afiliados dispuestas a enfrentarse al Estado (caso de la C.N.T.). Tras la caída de éstos, y el establecimiento por parte de EE.UU. en Europa de Oligarquías de partidos después de 1945, los sindicatos han pasado a ser, notablemente en España, otros órganos del Estado, como los partidos a los que están ligados en ciertos casos, que reciben subvenciones de éste, y que actúan como terminales de la corrupción partidocrática, muy lejos de cualquier idea de representación de los intereses de los trabajadores.

Paco Núñez recuerda que el PP, que tiene ahora el gobierno regional en Andalucía, se jacta de la presunta falta de corrupción de su gestión, contra lo hecho antes por el PSOE, pero "Este estado de confrontación permanente, típico de la partidocracia para moldear ultras en lugar de votantes reflexivos, se ha parado en seco hoy en el Palacio de San Telmo. De repente, Elías Bendodo ha rechazado la posibilidad de meterse con su rival político, Juan Espadas, que, recordemos, no está en el Parlamento de Andalucía actualmente. El motivo es vox populi: la lamentable declaración de su mujer, Carmen Ibanco, actual trabajadora del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) y extrabajadora de la extinta Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo (Faffe). Ibanco compareció el pasado viernes en la comisión de investigación sobre dicha fundación. Ibanco fue presuntamente enchufada en Faffe mediante un contrato exprés y Bendodo no ha querido hacer leña del árbol caído. ¿Por qué?" Núñez ve dos posibles respuestas: "No sabemos si le ha llegado al corazón el 50 aniversario de la canción Imagine, de John Lennon, o si se trata de algún tipo de estrategia del PP (Moreno Bonilla también declinó hacer sangre diciendo que no quería caer en «la política carroñera») para que los árboles no dejen a la ciudadanía ver el bosque siniestro de la partidocracia." Para el periodista, en fin, la razón estriba en un maniobra de maquiavelismo electoral que demuestra la misma indignidad y corrupción partidocrática de sus promotores: "En un abrir y cerrar de ojos, Elías Bendodo se convirtió en un buen samaritano dispuesto a perdonar y olvidar. Señor Espadas, puede usted pasar de curso sin recuperación. No hace falta que su mujer dimita para favorecer su carrera por la A mayúscula. También permitiremos todos que usted siga como secretario general del PSOE, no le obligaremos a largarse. Miramos para otro lado y Santas Pascuas, porque es usted el enemigo más débil. «Ahora Andalucía es más sanchista que socialista«, Bendodo dixit. Eso sí, esos ecuánimes y dialogantes señores con corbata y camisa azul que ahora le pasan la mano por el lomo, están afilando sus espadas para destrozarle el día de las elecciones. No quieren a otro. Le quieren a él."

Alberto Iturralde y Emilio Triviño señalan la nula responsabilidad que asumen los políticos por su mala gestión, que llegan incluso a ser recompensados por su incompetencia pro parte gracias al sistema de las lllamadas "puertas giratorias". Así, el gobierno de turno habla de reducir por decreto los beneficios de las compañías eléctricas, mientras no se toca el proceso de fijación del precio de la luz, y ni siquiera tales decretos tendrán un desarrollo efectivo cuando cesen de sonar los atabales mediáticos. Es la inexistencia de separación de poderes en origen lo que permite esta alianza del poder político oligárquico y la oligarquía económica.